Tarta de queso japonesa o esponjosa

Y hoy vamos con una tarta de queso diferente porque tiene una textura parecida a la mousse y sin base de galletas, aunque eso por mi parte debería añadirlo, por que si os cuento un secreto, a mí la parte que más me gusta de la tarta de queso es la base de galletas, ni queso ni nada, las galletas... Vamos que como digo yo, ¡Tiene tela la cosa!

Vamos con la receta.

Ingredientes:

450 g mascarpone
100 ml. leche
55 g mantequilla
6 Huevos M a temperatura ambiente (yo lo saqué 30 min antes de hacer la tarta)
200 g azúcar
60 g harina
20 g maizena
1 sobre de gaseosa
Zumo de un limón
1 pizca de sal.

Preparación:

Para comenzar, en un cazo a fuego lento ponemos los quesos, la mantequilla, 50 g de azúcar y la leche a calentar, removiendo hasta obtener una mezcla homogénea. Entonces retiramos del fuego y dejamos enfriar.

Seguidamente tamizamos las harinas y las añadimos a la mezcla de quesos removiendo hasta incorporarlas por completo, entonces añadiremos las yemas de huevo y el zumo de limón.

A continuación, montamos las claras de huevo a punto de nieve con el sobre de gaseosa y la sal.Cuando estén medio montar añadir poco a poco 150 g de azúcar. Agregamos a la mezcla anterior con movimientos envolventes y la vertemos en un molde, (yo en mi caso utilicé uno cuadrado y aconsejo que no sea desmontable, pues la mezcla es muy líquida y podría salir del molde) , previamente engrasado.

Horneamos al baño maría una hora y cuarto (75 minutos) a temperatura 160º de manera que la parte de arriba se dore ligeramente. Una vez transcurrido este tiempo dejar enfriar en el horno durante 50 minutos sin abrir la puerta del horno.

Presentación: Yo desmoldé la tarta y cubrí la parte de arriba con una mermelada de higos y brevas al cacao. No os puedo decir donde la podéis encontrar porque fue un regalo... Lo siento. Pero lo podeis hacer con cualquier otra o simplemente dejarla así.