Vamos con la receta.
Ingredientes:
500 g harina
250 ml aceite girasol
La piel de un limón
125 ml anís seco
Preparación
Precalentamos el horno a 180 º.
En un cazo ponemos el aceite a calentar con la piel del limón y lo retiramos del fuego cuando esta comience a dorarse. Retiramos la piel del limón y vertemos el aceite poco a poco sobre la harina que tendremos preparada en un cuenco que aguante bien el calor, vamos removiendo con una cuchara y cuando ya podamos tocar la masa añadimos el anís y comenzamos a amasar con las manos, hasta que obtengamos una masa manejable.
A continuación, forramos una bandeja de horno con papel vegetal y vamos haciendo bolitas con porciones de masa del tamaño de una nuez, los colocamos separados y con un palillo las pinchamos en el centro y con una cuchara las aplanamos un poquito. Cuando hayamos hecho todas las bolitas, metemos la bandeja al horno y los horneamos aproximadamente unos 30 minutos aunque yo los suelo dejar un poquito más.
Antes de que se enfríen los rebozamos en azúcar y los colocamos en la bandeja de servir o en un recipiente hermético.
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