Leche frita

Hoy le toca el turno a uno de mis postres preferidos en la infancia y es que hasta que no descubrí mi pasión por la cocina, no me hubiera imaginado nunca que podría haber podido llevarlo a cabo, pero ya sabeis que nada es imposible en esta vida y la preparación de este magnífico postres no es muy complicada. ¡Vamos con ellos!

Ingredientes:

1/2 l leche
6 Huevos
60 g maizena
60 g harina
120 g azúcar
1 c/c esencia de vainilla

Preparación:

En un cazo ponemos a calentar la leche.

En otro cazo a parte ponemos a calentar los huevos con el azúcar hasta que esta se disuelva y añadimos la esencia de vainilla, removemos. Después incorporamos la harina y la maizena removiendo bien hasta que desaparezcan por completo y por último añadimos poco a poco y sin dejar de remover la leche hirviendo.

Pasamos la crema por la batidora o la mezclamos bien en la thermomix programando 2 min velocidad 4 y dejamos reposar sobre un molde, yo utilicé uno redondo pero aconsejo utilizar un cuadrado ya que así las porciones quedan más estéticas.

Dejamos enfriar a temperatura ambiente para que cuaje. Una vez haya cuajado, necesita aproximadamente 1 hora, cortamos en porciones con un cuchillo afilado y las vamos rebozando en harina y huevo, para después freírlas en abundante aceite.

Para la presentación, mi consejo es que las rebocéis en una mezcla de azúcar y canela y las acompañéis con una buena bola de helado de turrón, ya veréis como el contraste de sabores y la fusión de caliente y fríos os fascina. Yo no tenía bola de helado por lo que me tuve que conformar con comerla calentita y rebozada en azúcar glass y canela.