Pimientos de piquillo rellenos de bacalao

A pesar de que esta es una receta de cuaresma, debido a que, según dicen, el bacalao es el pescado por excelencia de este tiempo, a mí me ha dado deseo de elaborarla ahora y como soy de las personas que piensan las cosas e intentan hacerlas... pues.... aquí estoy manos a la obra.

No obstante, también me he decidido a realizar esta receta porque me recuerda a esos fines de semana en que iba con mis padres y unos amigos a comer, y uno de estos amigos siempre, siempre, siempre preguntaba por estos pimientos y cada vez que había en el restaurante los pedía y disfrutaba mucho comiéndolos, creo que si él o algún miembro de su familia lee esta entrada sepa a quién me refiero. 
Pues a él le dedico esta entrada y también parte de mi blog, ya que también le debo parte de mi pasión por la cocina. 
Yo era la personita más feliz cuando nos invitaban a su casa a cenar y  me colocaba a su lado para que me fuera dando tapitas...disfrutaba lo indecible... Yo también te sigo queriendo...Muchos me entenderéis

Ingredientes: 
16 pimientos de piquillo
300 g lomos de bacalao
1 cebolla 
60 g mantequilla
40 g harina
40 g maizena
400 ml leche templada
Sal
Pimienta
Nuez moscada

Preparación:
El día de antes de la realización de los pimientos haremos el relleno. Primero, ponemos el bacalao a cocer en agua abundante con una pastilla de caldo de pescado. Una vez que esté cocido, lo desmenuzamos y reservamos. 

Para hacer la bechamel, ponemos en una olla la mantequilla y cuando esta se halla deshecho por completo añadimos la cebolla, que previamente habremos rallado, sofreímos y seguidamente, añadimos la harina y la maizena, para que se "cocinen", siempre moviendo con unas varillas manuales. Finalmente, añadimos poco a poco la leche y vamos integrando, hasta conseguir una mezcla blanca homogénea y sin grumos, lo más importante. Sal pimentamos al gusto y añadimos la nuez moscada, dejamos reposar hasta que se enfríe y refigeramos en el frigorífico en un tupper o en un bol forrado con papel film hasta la mañana siguiente. 

Al día siguiente, nos dispondremos a rellenar los pimientos de piquillo con el relleno y los colocamos en una bandeja de horno o en una cazuela de barro, esta última opción más aconsejable pues así los podemos servir en esta directamente. 

Finalmente, rellenamos una manga pastelera con boquilla de estrella,con mayonesa y realizamos pequeños montoncitos sobre nuestros pimientos, antes de servir lo único que tenemos que hacer es pre calentar el horno a 200º arriba y abajo y meter los pimientos durante 10 minutos y finalmente darles un toque de grill para que se gratine la mayonesa. 

Llamamos a todos a la mesa y... ¡A comer!